Las anécdotas sobre el fumador Nº1, Fidel Castro, son miles, tantas como los cohiba que durante 50 años produjo y exportó Cuba a cualquier parte del mundo donde hubiera fumadores que aprecieran la gesta de la revolución y aspirar el aroma de la combustión de la hoja de tabaco más famosa del mundo. Al cabo de medio siglo de vida el prestigioso puro cubano se encuentra en perfecto estado de salud, sin duda mejor que muchos fumadores encallecidos que prefieren los riesgos del tabaco antes que la abstinencia. La empresa cubano-británica “Habanos S.A.” presenta en estos días el super “Cohiba 50 aniversario”, un cigarro que aseguran será “irrepetible” y que los cubanos verán solo en fotografías o en las vidrieras de los hoteles para extranjeros.
La oportunidad para celebrar, con la correspondiente degustación de las fragantes volutas, será el “XVIII Festival Internacional del Habano” que convoca en la Isla caribeña a más de 2000 amantes de los cigarros, provenientes de 60 países. Para ellos se han elaborado solo 2.500 ejemplares con hojas de Vuelta abajo, la región de la occidental provincia cubana de Pinar del Río donde se produce el mejor tabaco natural del mundo. Los espectaculares cigarros doc se presentan en una serie única de 50 cofres, conocidos como humidores, que los mantienen en las condiciones óptimas de temperatura y humedad, fabricados con maderas preciosas como ébano, sicómoro y cedro, en colaboración con la compañía francesa Elie Bleu, con sede en París. Cada uno de esos cofres estará numerado y personalizado con el nombre del afortunado propietario. Son obras de arte que serán subastadas durante el Festival.
“Habanos S.A.” considera que existe la posibilidad de obtener el precio más alto jamás pagado por un cigarro. La empresa, una sociedad entre el Estado Cubano y la inglesa “Imperial Tobaco”, comercializa 27 marcas de cigarros “premium” elaborados artesanalmente y de alta calidad, y no tienen ninguna duda de que se alcanzará el récord.
La marca cohiba fue creada en 1966 y durante muchos años estuvo solo destinada a regalos para personalidades del gobierno, nacionales y extranjeros, y para el consumo del presidente Fidel Castro, quien abandonó definitivamente el cigarro a fines de los años ’80.
Las leyes contra el tabaco que se fueron difundiendo en el mundo en las últimas décadas afectaron negativamente la industria del cigarro, pero el cubano fue el menos perjudicado. Más aún, el futuro del cigarro cubano es prometedor. Con ventas de 428 millones de dólares en 2015 (+ 4%), Habanos S.A tiene una cuota de mercado mundial del 70% en unidades comercializadas y 80% en valor, pero no tiene acceso al mercado estadounidense debido a la proscripción impuesta por el embargo de 1962.
Aunque la situación está cambiando y los cigarros están en primera línea para cruzar la frontera.
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