EL HURACÁN TRUMP A LAS PUERTAS DE MÉXICO. Están por comenzar las negociaciones para un nuevo Tratado de libre comercio (NAFTA). Puntos a favor y en contra según el análisis de un experto mexicano

La clepsidra comienza a marcar el tiempo (Ilustración de Victor Solís)
La clepsidra comienza a marcar el tiempo (Ilustración de Victor Solís)

La renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (North American Free Trade Agreement) es probablemente el acontecimiento político más importante de la región de Norteamérica. La primera negociación en 1994 se llevó a cabo en un mundo completamente distinto al que hoy conocemos. México emprendió una labor titánica nacional e internacional para lograr la aprobación del tratado. Hoy, con miras a la renegociación, Estados Unidos es el actor clave del que dependerá su éxito. Las rondas de negociaciones para el Tratado de libre comercio de América del Norte, uno de los acuerdos comerciales más importantes del siglo XX y un referente en la esfera del comercio internacional, comenzarán dentro de pocos días. Cuando fue aprobado en 1994, el candidato estadounidense afirmó que el tratado generaría “un fuerte ruido de succión en Estados Unidos”, y desde entonces esa idea sigue siendo un punto de referencia para los críticos del tratado.

La carrera por la Casa Blanca volvió a colocar en la agenda pública la situación comercial de Estados Unidos y la necesidad de revisar sus acuerdos actuales, sobre todo con China y México. La llegada de Donald Trump a la presidencia estadounidense convirtió la renegociación del NAFTA en un tema prioritario para los tres países y recientemente el gobierno estadounidense presentó sus objetivos para la renegociación, que comenzará dentro de algunas semanas. El éxito o el fracaso de la misma dependen en su mayor parte de Estados Unidos.

¿Cuáles son los escenarios que podrían retrasar o limitar el éxito de la renegociación del NAFTA?

La línea del tiempo de lo imprevisible. El principal factor de riesgo para la renegociación del NAFTA es la volatilidad y el carácter imprevisible de Donald Trump. Todos esperaban que el presidente se “moderaría” con el tiempo, pero no lo ha hecho. Es suficiente abrir la cuenta de Twitter del presidente para ser testigos de su volatilidad. En las última semanas su cuenta ha sido utilizada para provocar la renuncia del Procurador General, anunciar cambios en el gabinete (acompañados por una opinión personal sobre los mismos) y comunicar nuevas acciones como el veto a las personas trans género en las Fuerzas Armadas. Los tuits confirman que es imposible predecir la siguiente acción del presidente.

De ellos podemos aprender tres cosas: que el presidente sigue siendo tan volátil como lo fue en la campaña, que no mantiene ninguna lealtad hacia nadie en Washington y, más importante aún, que su base electoral sigue siendo su prioridad.

Los últimos meses han demostrado que el presidente cambia de opinión y de asesores constantemente, y que cada día actúa con un criterio diferente. Esta situación hace imposible que cualquier miembro del gabinete pueda garantizar el éxito de la renegociación. De la misma forma, los cambios en el gabinete han demostrado que para el presidente no existe ningún secretario indispensable, y por lo tanto un cambio de negociadores o secretarios en plena renegociación no debería sorprendernos. Por último en estos meses, cada vez que el presidente se ha sentido frustrado porque su agenda de gobierno no progresa como quisiera, ha decidido acciones unilaterales con el fin de satisfacer a la opinión pública. La salida del acuerdo de París y el reciente veto en el ejército se pueden explicar según esta lógica. El NAFTA siempre correrá el riesgo de ser utilizado con fines de propaganda por el residente de la Casa Blanca.

La parálisi legislativa. El Partido Republicano llegó a 2017 con el sueño de cualquier partido, una mayoría legislativa y el control del Ejecutivo. Una oportunidad única para hacer avanzar los intereses conservadores y deshacer la agenda de Barack Obama, pero nada de eso ha sucedido. En estos seis meses los congresistas republicanos no han logrado que avance la agenda del presidente ni la agenda republicana. Ni Mitch McConnell, el líder de la mayoría en el Senado, ni el mismo presidente han logrado unir a los congresistas en una agenda común. El fracaso en la cancelación y reemplazo del Obamacare, una de las principales propuestas de los republicanos en los últimos 5 años, constituyó un descalabro que pone en duda la capacidad del Partido Republicano para legislar y gobernar en los próximos meses. Si bien hasta ahora la mayoría de los congresistas han defendido el NAFTA, la fragmentación y polarización de ambas cámaras legislativas, sumado al debilitamiento de los líderes legislativos para organizar y encaminar el apoyo de los congresistas, puede ser un obstáculo importante para el NAFTA 2.0.

Los demócratas, ¿aliados incondicionales? Recientemente, el Pardito Demócrata presentó su nueva plataforma llamada A Better Deal, una serie de propuestas que buscan incrementar el sueldo de los trabajadores, reducir los gastos del día a día y proveer a los trabajadores de herramientas para competir en el mercado laboral. El partido está tratando de responder a las necesidades del electorado que en los últimos comicios le dio el triunfo a Donald Trump. Las regiones donde la tecnología desplazó cientos de trabajos y el crecimiento se estancó serán prioridad para el partido. Con este cambio queda por ver cuál será la posición de los demócratas frente al nuevo NAFTA.

Chuck Schumer, el líder de la minoría en el Senado (y el demócrata con mayor rango de su partido) declaró hace unos meses que apoyaría al presidente en la renegociación del NAFTA. Habrá que ver hasta dónde llega ese apoyo.

Las elecciones de 2018. El último factor que puede poner en riesgo el NAFTA 2.0 son las elecciones intermedias en Estados Unidos. En noviembre de 2018 se renovará toda la Cámara de Representantes y el Partido Demócrata tendrá que conquistar 24 escaños adicionales a los que tiene actualmente para ser mayoría. En esta misma elección se renovará una tercera parte del cuerpo legislativo, y es probable que los republicanos conserven el control del mismo. Si bien la discusión y aprobación del nuevo tratado podría ocurrir antes de la elección, muchos senadores y congresistas podrían dificultar su aprobación si reciben presiones del electorado. De la misma forma, las elecciones para gobernador en 39 estados, entre los cuales se destacan California, Nueva York y Texas, son hechos relevantes en el marco de la renegociación. En estos últimos meses los gobernadores han sido contrapesos importantes para las políticas de Trump al negarse a que se apliquen algunas disposiciones federales en sus estados. La reelección o llegada de nuevos gobernadores podría reconfigurar los equilibrios de poder en el interior de Estados Unidos.

¿Renegociación o impasse? Finalmente, la renegociación del NAFTA tiene que tomar en cuenta la implementación y entrada en vigor del mismo. Hasta ahora, la mayor parte de las propuestas de Trump no se han reflejado en una política pública o un programa concreto. Su presidencia se ha caracterizado por una centralización del poder federal y un abandono de las burocracias, que siempre habían sido las encargadas de implementar las propuestas y ejecutar los programas federales. El éxito del NAFTA 2.0 dependerá no solo de las negociaciones y la eventual aprobación del poder legislativo, sino también de las agencias encargadas de regular el comercio y coordinar acciones con sus contrapartes de Canadá y México.

La renegociación está dando los primeros pasos, pero será vital que quienes toman decisiones en México sean capaces de interpretar, en el análisis de la situación y la toma de decisiones, cuál es la visión local estadounidense,  para poder entender la lógica de sus políticos. Solo así podrán garantizar la afirmación y el avance de los intereses mexicanos en el nuevo NAFTA.

*Licenciado en Relaciones Internacionales, especialista en análisis de procesos políticos de Estados Unidos y la relación bilateral con México.

Nexos

Torna alla Home Page