De algunos observadores latinoamericanos, especialmente desde El Salvador, está llegando en las últimas horas la noticia, sin ninguna confirmación oficial todavía, de que el próximo domingo 21 de octubre, casi en medio del Sínodo de obispos dedicado a los jóvenes, el Papa Francisco presidirá en la Plaza de San Pedro varias canonizaciones. Entre ellas se destacan dos: la de Pablo VI – anticipada por el cardenal Pietro Parolin – y la de monseñor Óscar Romero, arzobispo de la capital salvadoreña asesinado en 1980.
Entre Mons. Romero y el Papa Montini siempre existió una relación afectiva y pastoral muy intensa y sincera. Fue precisamente Pablo VI el Papa que nombró obispo auxiliar de San Salvador a Óscar Romero en 1970, y luego, en 1974 obispo de Santiago de María, y en 1977 arzobispo de El Salvador. El obispo mártir estudió en la Universidad Gregoriana entre fines de los años treinta y comienzos de los cuarenta.
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