Vaya a saber si con el iPad de un Papa se trabaja mejor. Habrá que preguntárselo al comprador uruguayo que se adjudicó el iPad Apple del Papa Francisco, subastado por la conocida casa Castells de Montevideo por 30.500 dólares. Si es que quiere hacer declaraciones, porque no se conoce la identidad del generoso benefactor sino solo que –por expresa voluntad del donante- lo recaudado servirá para financiar las instalaciones de un nuevo colegio de Uruguay para jóvenes carenciados.
Lo que se adjudicó en la jornada del pasado lunes 14 de abril es un iPad 4 plateado con display Retina, un dispositivo Apple que permite una mayor resolución de la pantalla; en el dorso lleva la inscripción “Su Santidad Francisco”, “Servicio Internet Vaticano” y “marzo 2013”, y va acompañado por un certificado de autenticidad firmado por el Secretario particular del Papa, Monseñor Fabián Pedacchio Leaniz.
El pontífice había regalado la tablet al sacerdote uruguayo Gonzalo Aemilius, quien a su vez lo donó al Liceo Francisco, de la localidad uruguaya de Paysandú, a unos 370 kilómetros al norte de Montevideo. El colegio, después de intentar sin éxito la venta del iPad del Papa por intermedio de otras casas de subasta, acordó finalmente con Castells, adjudicándolo por una cifra que permitirá completar los trabajos de ampliación de la institución que lleva el nombre del Papa argentino.
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