La serpiente amazónica ha recorrido un largo camino, hasta llegar a las puertas de Holliywood. El jueves se sabrá si “El abrazo de la serpiente” del director colombiano Ciro Guerra llevará a Colombia el Oscar a la mejor película extranjera. “Un filme sobre el conocimiento, sobre la búsqueda, sobre el alcance, sobre los límites, sobre el caos que se produce cuando desaparece el conocimiento”, declaró el director colombiano de treinta y cuatro años en vistas de la ceremonia del 17. En las ediciones anteriores, los premios fueron para películas que muchos amantes del cine conocen de memoria: Amores perros (México, 2000), El hijo de la novia (Argentina, 2001), El crimen del padre Amaro (México, 2002), El secreto de sus ojos (Argentina, 2009, el único caso que se llevó la estatuilla), Biutiful (México, 2010), No (Cile, 2012) y Relatos salvajes (Argentina, 2014).
“El abrazo de la serpiente” es una obra que inmediatamente impresiona por su originalidad. La idea genial, la que llevó a emprender una odisea hacia lo desconocido a toda la troupe de Ciro Guerra, llegó en 2010, cuando un amigo antropólogo del director, Ignacio Prieto, le entregó copias de los diarios de los exploradores Koch-Grunberg y Richard Evans Schultes donde relatan sus travesías por el Amazonas a principios del siglo XX. A partir de ese momento Ciro Guerra se puso a trabajar con el propósito de dar forma al proyecto.
El guión requirió tres años de trabajo, la filmación siete semanas en las localidades amazónicas de Vaupés y Guainía. El resultado empezó a circular en 2015. El filme recibió la ovación del público en Cannes, ganó los festivales de India, Lima, Mar del Plata y Ereván (Armenia). Hace dos meses se anunció que competía por los Spirit Awards, que premiarán lo mejor del cine independiente el 27 de febrero próximo. Como si no fuera suficiente, el jueves 17 de diciembre “El abrazo de la serpiente” fue seleccionado entre los nueve que aspiran al Oscar a la mejor película extranjera.
Cuando le preguntaron la razón de tanta atención, Ciro Guerra explicó a la revista Semana: El abrazo de la serpiente “tocó una fibra, porque acerca al espectador al conocimiento de lo tradicional y a otra forma de ver la vida”. Y esa “otra forma de ver la vida” es lo que veremos pronto en la pantalla grande, cuando se haya celebrado el rito más codiciado por directores y productores del planeta.