Eran más de 200 mil candidatos, 202.586, para ser más exactos. Equitativamente repartidos entre los dos sexos, como requiere el protocolo galáctico de la NASA. Ahora quedaron cien aspirantes a vivir –y a generar vida, tal como nosotros la conocemos- en el legendario planeta rojo. Dentro del grupo que superó la última ronda de selección hay tres latinoamericanos: un chileno, un brasileño y un boliviano.
La selección del programa “Mars One” fue exigente y todavía no ha terminado. La fase siguiente debe eliminar otros sesenta, y consiste en una especie de “reality show” cuyo propósito también es reunir una parte de los 6 millones de dólares que cuesta financiar la misión, prevista para 2024.
Antes de la fatídica fecha, el programa tiene previstas cuatro etapas: el envío, en 2018, de un sistema satelital para comunicaciones interplanetarias; en 2020, un robot explorador al que seguirá, en 2022, material de equipamiento y al año siguiente las cabinas destinadas al alojamiento de los humanos. Por ahora se elegirán solamente 24 postulantes.