Las dudas siempre fueron pocas, pero ahora incluso las pocas que podían generar los problemas judiciales de Lula quedaron atrás en el camino que lleva a las elecciones presidenciales de 2018. Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) acaba de anunciar que regresará a la primera línea. Con una motivación noble: defender a Dilma Rousseff que navega en aguas turbulentas y está muy necesitada de una maciza inyección de energía política. Sin embargo –piensa Lula- eso tampoco será suficiente para plantarla en una nueva contienda en el plano nacional y en consecuencia su propia candidatura a la presidencia en las elecciones de 2018 no puede dejar de levantar vuelo.
Lula lo dijo con una perífrasis ornitológica, teniendo a su lado a otro ex que no seguirá siéndolo mucho tiempo más, el uruguayo José Pepe Mujica: “Los adversarios, todo el santo día están hablando de mí y aprendí una cosa: sólo se puede matar a un pájaro si se se queda quieto. Si sigue volando es más difícil. Por eso, yo volví a volar de nuevo”.
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